Este año, más de 1800 scouts hemos cambiado la habitual explanada de EL ESCORIAL (Madrid) por tierras abulenses: PEGUERINOS (Ávila) el 18 y 19 de abril
Aunque sólo estaba invitado el sol, nos llegaron unas grandes nubes cargadas de granizo; y aun así nada nos quitó las ganas de compartir la celebración.
Lo mejor de todo: como dice nuestro himno: LA UNIÓN. Compartir el día de San Jorge con el resto de grupos de todo Madrid fue una vez más, algo emocionante. Además este año, también estuvo con nosotros el grupo italiano Pietrasanta.
el Domingo la Eucaristía estuvo oficiada por el consiliario de Scouts de Madrid Don Jose Antonio Belmonte, acompañado de otros consiliarios, como los de los grupos de San Agustín y Santo Domingo. A ella también asistieron numerosas familias, representantes de ASDE (Asociación de scouts de España), de ASGAM (Asociación Scouts y Guías Adultos de Madrid ) y nuestro presidente de MSC (Jesús María)
AQUÍ OS DEJAMOS ALGUNAS FOTOS MÁS Y LA RESPUESTA A UNA PREGUNTA, POR SI ALGUNO SE LA HA HECHO...;-)
y por qué SAN JORGE?
En “Escultismo para muchachos” Baden Powell escribió:
“San Jorge es el tipo que deben seguir los Scouts.
Cuando se le presentaba una dificultad o un peligro por grande que pareciera –aún en la forma de un dragón- ni la esquivaba, ni la temía, sino que le hacía frente con todas sus fuerzas y las de su caballo....
Aún cuando armado inadecuadamente, pues sólo contaba con una lanza, se arrojó contra el dragón e hizo cuánto pudo, venciendo la dificultad que nadie se había atrevido arrostrar.
De esta manera exactamente es cómo los Scouts deben enfrentarse a las dificultades y a los peligros.
Sin tomar en consideración los grandes o terroríficos que pueden parecer, o lo mal equipados que se encuentren para hacerles frente.
Deberán arrostrarlos valientes y confiados, usando de todas sus fuerzas para vencerlos y las probabilidades son que saldrán victoriosos”.
“San Jorge es el tipo que deben seguir los Scouts.
Cuando se le presentaba una dificultad o un peligro por grande que pareciera –aún en la forma de un dragón- ni la esquivaba, ni la temía, sino que le hacía frente con todas sus fuerzas y las de su caballo....
Aún cuando armado inadecuadamente, pues sólo contaba con una lanza, se arrojó contra el dragón e hizo cuánto pudo, venciendo la dificultad que nadie se había atrevido arrostrar.
De esta manera exactamente es cómo los Scouts deben enfrentarse a las dificultades y a los peligros.
Sin tomar en consideración los grandes o terroríficos que pueden parecer, o lo mal equipados que se encuentren para hacerles frente.
Deberán arrostrarlos valientes y confiados, usando de todas sus fuerzas para vencerlos y las probabilidades son que saldrán victoriosos”.